No traigo fórmulas mágicas.
Ni listas de “hábitos de millonario” escritas por un becario con burnout.
Ni mierdas de “conviértete en un dios de la eficiencia en 21 días”.

Traigo una verdad incómoda:
Te han mentido.
Sobre el trabajo, sobre el éxito, sobre la productividad.
Y tú, como buen soldado obediente, te lo has tragado.

Yo también.

He sido empleado, autoexplotado y adicto a la falsa productividad.
Sé lo que es tener el calendario lleno y la cabeza vacía.
Lo viví, lo sufrí, y cuando decidí rebelarme, nació esto:

Rebelión de la Productividad.
Un libro que no te va a dar palmaditas ni frases de Paulo Coelho.
Te va a decir las cosas como son.
Y te va a enseñar a mandar a la mierda al jefe que llevas dentro, al Excel, al “deberías” y al “ya si eso lo hago mañana”.

No es un libro para sentirte mejor.
Es un libro para cambiar de una puta vez.

No hay gurús.
No hay hacks de Instagram.
Solo un método con cojones.
Para que pares de correr como un hámster y empieces a vivir como alguien que manda en su vida.

¿Tu día es una lista infinita de mierdas urgentes que no te acercan a nada importante?
¿Tu agenda parece una bomba de relojería?
¿Te suena eso de apagar fuegos y acabar fundido sin haber avanzado una puta mierda?

Entonces ya has esperado demasiado.

Esto no es solo un libro.
Es un arma.
Una patada en la boca a todo lo que te tiene atrapado.
Y el primer paso para recuperar tu tiempo, tu foco y tu vida.

¿Vas a seguir siendo esclavo de tu calendario?
¿O vas a rebelarte de una vez?

Aquí empieza la rebelión.
Léelo si te atreves.
(Y si no, vuelve al Excel. Ahí estarás a salvo. Más o menos.)